DESIGNACIONES, IMPROVISACIONES Y DESILUSIONES

Por: Miguel Godos Curay

Los burócratas no aprenden la lección. Imagen pública no es ni floro ni franela

La comidilla de los periodistas ayer fue la designación de Oswaldo Córdova  Correa como Director Ejecutivo del Programa de Apoyo Social (PAS). Una bienaventurada distracción y consuelo de conciencia para hacer el bien sin mirar a quien cuyo gobierno directo está en manos de la “Presidenta Regional”. Políticamente este nuevo cargo pesa menos que el que ocupó anteriormente. Él recomendado de Fabiola Morales y de Solidaridad, para unos, un experto en el patín, tendrá ahora que dedicarse a contentar a tutili mundi en todas las efemérides habidas y por haber verbigracia el día de la mujer, día de la madre y en navidad. Sobretodo deberá ensayar con tiempo el reparto de juguetes como Papa Noel sin dejar a nadie descontento. Asunto menudo y delicado.

Del nuevo jefe de la Oficina de Comunicaciones e Imagen Institucional se dijo lo siguiente. “Nos parece que es pura lengua y franela”. “Atkins sucumbe a los adjetivos fáciles como reina de yunce cuando le tumban el árbol y le encanta esa sensación aparente de que todo va bien cuando en realidad los problemas de la región se le van de las manos”.  Otros dijeron que el nuevo jefe le ha ofrecido a Javier mejorarle la imagen y hacerlo aparecer  en primera plana. La estrategia es muy sencilla. Gaseosita y bizcochos. Por ello el complot sugerido y de aplicación inmediata por la prensa es el de silenciar al Presidente Regional haga lo que haga, diga lo que diga, llueva o no llueva.

Los analistas más profundos llegaron a expresar con opinión autorizada que “la masonería ha sentado sus reales en el gobierno regional”. Pese a que este club de amigos no suena ni truena utiliza su influencia para colocar a sus miembros en lugares expectantes aunque no hagan nada. ¿Cuál es el rédito? El desgaste acelerado de la gestión mientras la ruleta para la designación de cargos sigue funcionando. Otros corrieron apuestas por el tiempo que el nuevo funcionario se mantendrá en el cargo. Unos dicen que no llega a la Pascua de Resurrección  y otros que durará el primer mes del año escolar. Otros no llega al día de la madre.

Otro tema político abordado fue la crisis interna que socava al gobierno regional. Ni la garantía de la patente “Unidos Construyendo” para el grupo de Luis Atkins obra a favor de Javier. La distancia entre el presidente y el vicepresidente regional es cada día más grande. La herida no cicatriza. Los grupos en controversia y los funcionarios que ayer copaban las proximidades de la presidencia no levantan cabeza. Son almas en pena. En este escenario y con una arquitectura social tan frágil la estructura política se fragmenta. No es necesario un mapa político para colorear las temperaturas de la confianza y la desconfianza ciudadana.

Los ciudadanos tienen natural desconfianza en los movimientos regionales, en las candidaturas populistas a los gobiernos locales. En los planes de gobierno que ofrecen el oro y el moro y finalmente provocan una decepción colectiva. La población se ríe de las propuestas para la seguridad ciudadana que lejos de aportar soluciones se convierten en mecanismos represivos. Pese a todo realmente la desaprobación de la gestión regional y la gestión municipal no tienen que desalentarnos. Esta es la consecuencia de las erráticas políticas públicas de espaldas a  la realidad. Es el producto de la necedad y la improvisación.

Frente a todo ello  sólo nos queda el ejercicio de una ciudadanía activa y responsable que permita que la población organizada se convierta en un interlocutor válido frente a los responsables de las decisiones políticas. El diálogo democrático tiene mucho más peso específico que una eventual encuesta para medir la presunta popularidad y el grado de aprobación y desaprobación de un presidente regional o un alcalde. Indudablemente que en todo ello tiene un peso incalculable la designación de los mejores funcionarios.