jueves, 23 de febrero de 2023

UCRANIA UN BRUTAL DESPOJO

Por: Miguel Godos Curay

Gregorio Potemkin y Catalina La Grande artífices del Imperio Rusp-

   Gregorio Potemkin  y Catalina la Grande artífices de la expansión Imperial Rusa.

A un año de la guerra con Ucrania se han destruido 240 centros culturales, patrimonio  saqueado sin  contemplación por los rusos. Odessa, la ciudad portuaria a orillas del mar Negro, una reliquia de la arquitectura decimonónica, fue sometida a la destrucción brutal con misiles rusos. La Unesco la ha declarado patrimonio cultural de la humanidad en peligro. Ucrania con más de un centenar de museos de arte, historia, folklore, ciencia y cultura se han quedado sin el suministro energético lo que afecta la conservación de valiosos bienes culturales seculares. El saqueo de las tropas rusas sólo es comparable la de los nazis. Muchas piezas de este botín de guerra van al mercado negro que trafica obras de arte.

Este patrimonio es el cimiento de la identidad social y cultural de Ucrania que Putin se ha empecinado en destruir. El saqueo perpetrado dejó en carne viva  la reedición de crímenes de lesa humanidad  cometidos por los nazis. Las puertas de los museos y repositorios fueron violentadas. Las tropas como en los tiempos de la barbarie arrasan con lo que presumen podrán vender a coleccionistas inescrupulosos o cambiar por alcohol en esta
secuela de la guerra.

La reconstrucción Ucrania demandaría 350 mil millones de dólares según las estimaciones de la Comisión Europea y el Banco Mundial. Casi la totalidad de los activos congelados a los oligarcas rusos cuyas maniobras  para eludir el control son considerados  delitos se destinarán a Ucrania. El colmo del despojo tiene  sabor a necrofilia. Soldados rusos de élite se llevaron los restos de Gregorio Potemkin (1739-1791)  príncipe y valido de Catalina la Grande quien en el siglo XVIII fue un símbolo  y propulsor de la expansión del imperio ruso. Uno de los objetivos políticos de Catalina II era el expandir el imperio hacia el sur y hacia el oeste, agregando los territorios de Crimea, Bielorrusia y Lituania. Gracias a  acuerdos con Prusia y Austria dividieron Polonia entre 1772 y 1795, extendiendo las fronteras de Rusia hasta el centro de Europa.

Potemkin el estratega militar, estadista y noble ruso mantuvo una alianza sexual y política con Catalina II fue en buena cuenta el gestor del imperio ruso. "A pesar de que Catalina era 10 años mayor que él, fueron amantes durante largo tiempo, amigos hasta la muerte y probablemente esposos en secreto", escribe el escritor colombiano Daniel Samper Pizano en su libro "Camas y Famas".  Catalina de Rusia fue grande en la cama con muchos amantes, en especial el fascinante tuerto Gregorio Potemkin al que lloró lúbrica y acongojada sin consuelo.

Valido, se denominaba al miembro de la aristocracia que contaba con la plena confianza de la soberana. El secreto amante de  Catalina la Grande es hoy un símbolo del expansionismo imperial ruso del afiebrado Putin.  Dicen que recibió los restos de Potemkin, a quien admira, y se sintió perversamente conmovido cuando las tropas rusas incursionaron en la catedral  de Santa Catalina de Jerson de Ucrania y se llevaron en una bolsa el cráneo y los huesos del santo príncipe Potemkin. Putin le dio un beso al cráneo y dispuso que sea enterrado en un espectáculo imperial televisivo global.

Potemkin es para Putin el símbolo de su guerra. Y lo menciona cada vez que invoca al surgimiento del nuevo imperio ruso. Potemkin murió en 1791 durante las negociaciones del tratado que puso fin a la guerra con el Imperio Otomano. Como bien señala la prensa internacional el nuevo botín de guerra de Rusia son los huesos de Gregorio Potemkin, amante de Catalina la Grande y resorte de su expansión imperial.

Museos y teatros, en Ucrania, pese a la tragedia se mantienen en  actividad gracias al esfuerzo patriótico de artistas despojados de escenarios y  de sus instrumentos musicales. Las estatuas símbolo del orgullo del pueblo son convertidas en polvo o arrancadas de cuajo y convertidas en trofeos de guerra. Bienes culturales invalorables  son siniestramente lanzados al mercado negro de obras de arte. Los planes imperialistas de Putin no tienen límites. A un año de la guerra no conocemos con certeza el número de soldados muertos en ambos frentes. El general Mark Milley, jefe del Estado Mayor Conjunto de EE. UU estima que son  cerca de 100 mil soldados rusos y 100 mil ucranianos  y alrededor de 40 mil civiles en el escenario del conflicto.

La ONU con estadísticas certificadas sostiene que son 7 mil 110 los muertos, 11 mil 547 los heridos y mutilados. Un éxodo no registrado en la historia es el desplazamiento  de 18 millones 136 mil 866 personas obligadas a abandonar el territorio ucraniano, estadísticamente el  44.2% de la población de Ucrania estimada en 41 millones de habitantes en el 2021. Alrededor de 16 mil niños huérfanos han sido destinados a adopciones obligadas en Rusia. No se descarta la manipulación psicológica en favor de la invasión. Se han denunciado 65 mil los crímenes de guerra registrados en Ucrania. Una historia documentada de la criminal destrucción de hospitales, instalaciones sanitarias, ambulancias, escuelas, universidades, 75 mil edificios de residencia e iglesias no tiene límites.

Una consecuencia inmediata de la conflagración es el alza de los precios del trigo, cereal que junto con el arroz y el maíz son imprescindibles para la seguridad alimentaria. Ucrania y Rusia son grandes productores de trigo del que depende la seguridad alimentaria de África. Las importaciones africanas de Rusia (2020) eran del orden de los 4 mil millones de dólares. Las de Ucrania son 2,9 millones de dólares según los registros de Acción Mundial contra el Hambre. Los precios de la harina de trigo se han incrementado por encima del 50%  los “disturbios de hambre” tienen un rostro patético en la economía mundial.

El Presidente Biden desde Varsovia, la capital de Polonia,  afirmó que “Ucrania  nunca será una victoria para Rusia”. Voldimir Zelenski, el Presidente de Ucrania se mantiene en firme y en pie con el apoyo de la OTAN, Estados Unidos, Alemania, Polonia, el Reino Unido, Canadá, Noruega y Francia entre otros países que han  hecho efectivo su apoyo en este desigual combate entre David y el gigante Goliat. China, ha negado sistemáticamente  vaya a enviar armas a Putin. Vladímir Putin anunció, hace algunas horas, la suspensión del tratado nuclear Nuevo START firmado por Rusia y Estados Unidos. Su Santidad Francisco dijo ayer al final de la audiencia general del 22 de febrero de 2023 celebrada en el Aula Pablo VI: "Pasado mañana, 24 de febrero, se cumple un año de la invasión a Ucrania. Un año del inicio de esta guerra absurda y cruel. El balance de muertos, heridos, refugiados, desplazados, destrucciones, daños económicos, y sociales hablan por sí solos". Un triste aniversario". “¿Podrá el Señor perdonar tantos crímenes y tanta violencia?».

miércoles, 22 de febrero de 2023

EL PEOR DE LOS VENENOS

Por: Miguel Godos Curay


El peor de los venenos es el que se elabora con miedo y odio químicamente puros. Mueve los rescoldos del resentimiento y la confrontación racial. Siembra la frustración ahí en donde antes habitaba la esperanza. Un verter hiel sobre la sopa para que nadie la pruebe y  la tome. Lo mío ya no se comparte.  El reparto se hace con los bienes ajenos no con los propios que están a buen recaudo en este injustificado y curioso método de hacer justicia. Se repiten las consignas violentas y sanguinarias, es el viejo pavor de la estrategia terrorista. Nunca como hoy se han vertido tantas mentiras en las redes sociales. Nunca como hoy vivimos a salto de mata por la confrontación odiosa. Tras el polvo, el agua de acequia y las pinturas del carnaval retornamos para quejarnos de la falta y escasez de agua. Gracias a Dios llueve y si las precipitaciones se desbordan, vendrá el carnaval de las emergencias.

La destrucción de lo invertido es el castigo para los empresarios que apuestan por el país. El bloqueo de carreteras, el incendio de peajes, la quema de los archivos del Ministerio Público y el Poder Judicial busca el no dejar  ni el humo de los procesos criminales de corruptos, narcotraficantes y mineros ilegales. La destrucción del país por el fanatismo es el ingenuo fermento de la revolución. La corrupción  sigue siendo la gangrena pestilente de nuestras instituciones políticas. Celebrar con aguardiente y coca la hoguera en el que arde el cuerpo de un efectivo policial ultimado salvajemente es una orgía salvaje y demencial. Destruir aeropuertos es matar el turismo atisbo de progreso y fuente de ingresos para muchas familias que dejaron de sembrar. No nos vengan con el cuento de las protestas pacíficas infiltradas por delincuentes y agitadores. ¿Quién alimenta y quien financia los despropósitos arrasadores y destructivos? ¿No nos vengan con el otro cuento del cierre de carreteras impidiendo que productos de consumo masivo lleguen a su destino  y se pudran en el camino por iniciativa de descontentos civilizados?

La inflación en enero superó el 9% en los mercados. El peruano común y corriente cada vez compra menos pues el dinero no  alcanza. Todo se encarece impunemente. Sumemos a ello el mayor precio y menor aplicación de los fertilizantes. Según el BCR los productos para el cuidado personal se incrementaron en enero un 0,5%.Cremas dentales (1,2%), champús (1,0%), pañales y jabones (0,8%cada uno), papel higiénico (0,6%). Los magros salarios no alcanzan para cubrir los sobrecostos de la violencia  que paraliza la economía.  Michael Reid, editor de  The Economist, advierte, la situación del país es sumamente compleja y peligrosa. Si en el Congreso no hay un consenso se corre el riesgo del desborde  y conatos  de ira popular que pueden desencadenar una insurrección mayor de indecibles impactos en la economía.

Grupos autoritarios y agitadores políticos extremistas afines al senderismo buscan la salida del gobierno y del Congreso e instalar una constituyente para conquistar el poder  tal como lo acontecido en Chile. Muchas veces, ignorando la evolución de este proceso: En el 2020 aprobaron de modo vehemente redactar una nueva constitución. El 2021 eligieron a los miembros de la  Convención constituyente. En 2022 mediante plebiscito obligatorio se acordó rechazar el mamotreto constitucional propuesto. La nueva Constitución fue unánimemente rechazada por el sentido común ciudadano. Por eso no nos vengan  con nuevos cuentos. “Boric quería nueva Constitución. Chile de pie le dijo que ¡No!”

Arde el sur, no arde el Perú. Cajamarca la tierra de Castillo celebró con desproporcionada euforia. Castillo, fue el heredero omitido del testamento de Ño Carnavalón. Igual sucedió en todo el norte. Mientras en Puno persiste la protesta. El norte se prepara para la cuaresma.

Sin embargo, no hay que olvidar que los muertos en este escenario conflictivo y polarizado son carne de cañón para que arda la pradera. El Congreso y el Ejecutivo añaden su cuota en este clima de desasosiego e incertidumbre política. Para los agitadores con nombre propio una protesta sin sangre es como un carnaval sin polvo y serpentinas. Los errores del gobierno son el agua jabonosa sobre el piso que provoca resbalones. Mientras tanto, la economía nacional se hace añicos.

El camino a la estabilidad política requiere decisiones firmes, no es fácil restablecer el orden cuando el desorden recurre artificiosamente a eventuales grupos defensores de Derechos Humanos y  a toda una estrategia del vocerío internacional sesgado por la izquierda. El rédito es despedazar  la economía  del Perú. Para muchas ONGs tiene más interés exacerbar los conflictos en el Perú que defender los Derechos Humanos en Ucrania. Rusia es la víctima, para muchos extraviados voceros políticos de la Unión Europea. La manipulación de las redes sociales y las noticias falsas sobre el Perú se multiplican. Sólo se da cuenta de víctimas pacíficas que recorrían las calles en procesiones ciudadanas. Se omiten deliberadamente los daños a la propiedad pública y privada, los muertos en carreteras bloqueadas, los efectivos policiales asesinados impunemente, la producción irremediablemente perdida, la industria paralizada, la destrucción artera de los aeropuertos. El impacto sobre la economía de subsistencia de los pobres que no tienen que comer.

Por supuesto, el narcotráfico, la minería ilegal, la trata de personas, los traficantes de tierras que financian la algazara no aparecen por ninguna parte. Los destructores de fábricas, equipos cuantiosos de  la actividad minera, los financistas de la asonada se esfuman en las notas de la prensa alternativa natillera y mermelera. Por el momento son los buenos de la película. Los más afectados son los peruanos que a duras penas se sostienen con su trabajo. La inflación dispara los precios en los mercados. La pobreza y la miseria tienen hoy múltiples rostros. Y la vesania criminal amenaza ahora con impedir que  6 millones 797 mil 295 escolares del Perú matriculados en 84 mil 917 instituciones educativas  acudan a clases. Ya lo verán.